Una colección de historias, anécdotas, reflexiones y chorradas varias sin más objetivo que entretener

jueves, 8 de diciembre de 2011

La semana de cuatro días

Hace unas semanas, en un descanso en el trabajo, mis compis y yo discutíamos sobre cómo había caído este año el puente de la Constitución en el que nos encontramos. Éramos tres los que estábamos hablando y cada uno tenía una opinión diferente. Partiendo de la base de que los tres íbamos a trabajar los días laborables del puente, la pregunta era cómo creíamos que caía mejor en esa situación de tener que ir a trabajar pasara lo que pasara. Mi compi D. pasaba 100 pueblos de cuándo cayeran las fiestas, simplemente le parece bien que las hubiera, mientras que la verdadera discusión estaba entre mi compi A. que defendía enconadamente que lo mejor era que las fiestas fueran lunes y miércoles (o en su defecto miércoles y viernes) y yo que me postulaba justo en lo contrarío (martes y jueves), como sucede este año y que, bajo mi punto de vista, te permite que la semana tenga "tres viernes" y "tres domingos", te dé tiempo a descansar y hacer lo que te apetezca, y la parte del trabajo te resulte más leve. Como era de esperar, no convencimos a nadie y nuestras opiniones se mantuvieron como al principio.


El caso es que la historia del puente me hizo recordar una idea chorra que se me ocurrió hace tiempo en relación con la semana laboral. Se trata de la semana de 4 días, en la que se trabaja 3 días y se descansa 1. Evidentemente, no le di más vueltas a la idea que la del planteamiento de pasar de semanas de 7 días (en los que 5 son laborables) a semanas de 4, no pensé en las horas de trabajo, ni en días de vacaciones, ni mucho menos en la posibilidad de jornadas reducidas el día previo al día de descanso. Como es lógico, ya que nos ponemos, todas esas cosas, puesto que se trata de una idea imposible de realizar, serían fantásticas: jornada de 8 horas (por ejemplo de 9 a 18 con una hora para comer) con posibilidad de que fuera intensiva (de 8 a 15, por ejemplo) y con jornada reducida el "triernes" (tercer día laborable), eso sí, el número y el día de los festivos (Navidad, Semana Santa y demás) y la cantidad de días de vacaciones serían los mismos pero existiría un pequeño truco, que comento a continuación.

El truco en sí es que, pasando de la semana de 7 días a la de 4 con las condiciones que expongo, los días laborables serían menos. Parece una tontería pero estoy convencido de que con ese argumento más de uno y más de dos aceptarían la semana de 4 días sin pensárselo dos veces. La idea se me ocurrió cuando, pensando en el número de días laborables, me acordé de cuando negociaba la paga que me daban mis padres. Mi padre pretendía darnos a mi hermana y a mí una asignación mensual, pero haciendo unos sencillos cálculos llegué a la conclusión de que si la paga era semanal, en conjunto recibíamos más dinero. Será una tontería, pero para un chaval 5 € arriba o abajo sí son importantes. Así que al pensar en cómo disminuir el número de días laborables, extrapolé la idea de la paga y se me ocurrió lo de la semana de 4 días. No sé qué pensará el que lea estas chorradas, pero tanto si le parece bien como si le parece una completa estupidez, se agradecen comentarios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario