Una colección de historias, anécdotas, reflexiones y chorradas varias sin más objetivo que entretener

jueves, 31 de diciembre de 2020

Adiós 2020...

Iba a escribir "estimado" o "querido", pero la verdad es que no te has ganado ninguno de esos apelativos. Seamos serios, dentro de 16 o 17 años, se dirá "eso fue en 2020, el año de la pandemia". Y, claro, con esa coletilla, ¿cómo vas a ser estimado o querido? No hay manera.

Y eso que en el trabajo te has portado conmigo de fábula, no sólo me has dado más responsabilidad, sino que me he llevado un considerable aumento de sueldo (con el que no contaba para nada), así que no tengo queja alguna que hacerte, más bien lo contrario.

Respecto a la salud, teniendo en cuenta lo mierda que has sido con tantísima gente, tampoco me puedo poner tiquismiquis. En el confinamiento me mantuve en un peso adecuado, pero obviamente perdí la forma física que llevaba con la esgrima y el fitboxing, algo que me volvió a suceder cuando se confinó mi barrio. Vamos, que para lo que ha llovido poco me he mojado.

La familia se encuentra bien, algo digno de celebrar, visto lo visto. La abuela M. cogió el bicho en la residencia (vaya, qué casualidad...) pero era asintomática, algo que no le pasó a sus dos mejores amigas allí, que pasaron a mejor vida. La abuela T. se ha movido menos que los ojos de Espinete, así que no ha tenido riesgo. Mi madre tuvo un susto con una mancha en el pulmón, pero se quedó en eso, y la operaron de la mano en verano. Parece que todo está bien. A mi padre le han diagnosticado un déficit en una enzima de nosequé que puede dar enfisema pulmonar, así que se tiene que cuidar de una puta vez. Y lo mejor, mi hermana, que ha dado el paso y está embarazada. Sin duda, la mejor noticia del año. Por eso también te recordaremos, eh.

Llevo cinco años viviendo solo, pero ha sido con el tema del confinamiento con el que me he dado cuenta de que, aunque vivir solo no es lo peor, tampoco es lo mejor. Solo decides tú, haces lo que quieres, no das explicaciones... Pero tener buena compañía todos los días no se puede compensar con nada.

En asuntos más chorras, el Madrid ganó la Liga y la Supercopa de España, y el Estu se salvó gracias a la pandemia (al final tengo muchas cosas que agradecerle al bicho, parece), cosas que al iniciar el año no tenía nada claras. Obviamente el año en cuanto a viajes ha sido decepcionante, por trabajo fui a Perú recientemente (menudo show burocrático y de mascarillas) y por ocio a Dubrovnik (otro país nuevo incluso este año), pero no he salido más de España (aunque ir a Castellón, Almería o Galicia merece la pena).

Bueno, ya es hora de que te pires. Seguro que no te olvidaremos, pero no por los motivos que todos habríamos deseado... Y eso que tuviste un día más para cumplir con nuestros deseos.



martes, 1 de diciembre de 2020

Libros Leídos Noviembre 2020

Diciembre está al llegar...Cantaba Supersubmarina en su temazo "Kevin Macallister". Pues ya ha llegado, y con ello, la revisión de lo leído durante noviembre. Como me ha sucedido desde que llegó la pandemia para quedarse entre nosotros, el número de lecturas ha sido modesto. Cinco libros (dos en español, dos en inglés y uno en italiano), de los cuales dos fueron cómics, uno un compendio baloncestístico, otro una recopilación de columnas futboleras y una novela. Siguiendo con la numeración de libros leídos durante el año, tenemos:

55. "Roots" de Tara O'Connor. 152 páginas (tablet).

 La autora narra en este cómic autobiográfico cómo fue la búsqueda de las raíces (de ahí el título) de su familia en Irlanda. Ella venía de una época personal muy difícil tras una ruptura sentimental, y necesitaba un proyecto diferente y que la llenara, con lo que se embarca en un viaje de un mes hacia la isla verde donde encontrará parte de sus orígenes, sí, pero mucho más. Es una historia amable, romanticona, de esas que habremos visto o leído mil veces, pero que siempre te dejan buen regusto en la boca.

  

56. "The Stone King" de Kel McDonald y Tyler Crook. 129 páginas (tablet).

Como si de una novela de fantasía se tratara, este cómic nos traslada a un mundo en el que los humanos viven atemorizados por la presencia de un Rey de Piedra (un gigante de roca que destruye lo que haya a su paso) y en el que comienzan las aventuras de una joven ladrona, Ave, a lomos de otro animal fantástico (una especie de perro con tamaño de caballo). La historia es original y muy entretenida, te deja con ganas de leer más de las aventuras de este personaje y del mundo que la rodea.


57. "Otro libro de fútbol" de Enrique Ballester. 216 páginas.

Como ya hiciera en "Barraca y tangana", su libro anterior, Enrique Ballester hace un recopilatorio de algunas de sus columnas semanales en el periódico en el que trabaja. Supe de Ballester por vez primera cuando leí su libro "Infrafútbol", excelente memoir futbolero de aficionado de equipo de categoría inferior. Ya sea en los libros o en las columnas sueltas, todo ello centrado técnicamente en el mundo del fútbol, lo que el lector encuentra son auténticas reflexiones sobre la vida, tan certeras que es imposible no sentirse reflejado y asentir mientras lee. La mirada original y el humor que rezuma de esos textos hacen a Ballester el Enric González de mi generación. Un crack, vamos.


58. "Stabat Mater" de Tiziano Scarpa. 148 páginas (e-book).

Ambientado en lo que ahora es Italia, en la época y lugar donde Antonio Vivaldi nos regaló las Cuatro Estaciones, Tiziano Scarpa nos cuenta cómo era la vida de las jóvenes huérfanas que ayudaban al maestro en la representación de su música a través de un monólogo interior (no del todo pero casi) de una de ellas. Si bien la historia de estas jóvenes del Ospedale della Pietà puede resultar curiosa, el autor hace poco énfasis en la presencia del maestro, que aparece en un triste segundo plano. Es una pena, porque la historia del sacerdote Vivaldi tiene su interés.


59. "La Pitipedia" de Piti Hurtado y Antonio Pacheco, con ilustraciones de Lawerta. 288 páginas (tablet).

Si eres aficionado al baloncesto y naciste en los 70 o en los 80, este libro no te dejará indiferente, porque se trata de un compendio de anécdotas, personajes, análisis, chascarrillos y más en relación con el deporte de la canasta. La gracia de Pach con el fino conocimiento de Piti y las ilustraciones de Lawerta hacen de esta Pitipedia un buen medio para entretenerse rememorando, aprendiendo y disfrutando del basket.


 

miércoles, 4 de noviembre de 2020

Libros Leídos Octubre 2020

Octubre nos dejó el pasado fin de semana (largo) y es el momento de hacer reflejo en este post de lo leído durante ese mes. Han sido cuatro libros (dos en inglés, uno en español y otro en italiano), lo que refleja lo poco que estoy leyendo desde que llegó la pandemia (no ir en metro me ha dejado seco). De esos cuatro libros, tres fueron cómics y el otro una novela. Siguiendo con la numeración de libros leídos durante el año, tenemos:

51. "Fables, Vol. 1: Legends in Exile" de Bill Willingham. 128 páginas (tablet).

Los protagonistas de los cuentos clásicos (Caperucita, Blancanieves, el Lobo, Jack el de las judías mágicas...) viven entre nosotros desde hace un par de cientos de años, camuflados desde que los echaran de su tierra original. Agrupados como de una empresa cualquiera se tratara, tienen sus propios roles dentro del gigantesco edificio en el que viven, de tal manera que, cuando Rose Red (Caperucita) desaparece y un montón de sangre se encuentra en su piso, su hermana Blancanieves le encarga al Lobo que resuelva el caso. El punto de partida es original, al igual que muchas de las partes que se van contando en el transcurso de la investigación, y también entretiene, pero el devenir es un tanto irregular.


 

52. "100 Bullets, Vol. 1: First Shot, Last Call" de Brian Azzarello y Eduardo Risso. 128 páginas (tablet).

Un misterioso hombre, que se hace llamar Agente Graves, aparece en la vida de alguien que ha sufrido un duro revés en su vida y le ofrece un maletín con una pistola, 100 balas que no se pueden trazar (las del título) y la información sobre quién es el responsable de ese duro revés. La premisa es clara, ¿quieres venganza o no? La puesta en escena de esta historia es sencilla, pero a la vez original y que engancha con el lector, porque le hace preguntarse qué haría en cada una de las situaciones que propone.


 

53. "Civilizaciones" de Laurent Binet. 448 páginas (e-book).

En "Civilizaciones", Laurent Binet retoma la ficción mezclada con realidad, como ya hiciera en su novela anterior ("La séptima función del lenguaje") y le da un nuevo giro, respondiendo a la pregunta: ¿Y si la conquista de América hubiera sido al revés? De este modo, planteándose ese "what if" tan anglosajón, trata de construir esa conquista con pequeños cambios en la Historia que hacen que ese hecho (el descubrimiento de América) cambie por completo. A través de unos capítulos iniciales contando las inventadas crónicas de la hija de Eric el Rojo, mezcla realidad con ficción haciendo que los vikingos no sólo lleguen a Terranova sino que hagan todo el periplo por la costa Este de Norte América hasta Centroamérica. Allí se instalan (con caballos y todo) y, cuando Colón arriba allí siglos después, la respuesta de los nativos es radicalmente diferente a la que ocurrió. A partir de ahí, Binet traza paralelismos en lo que pasó en realidad y todo lo que inventa (incluida la conquista de España primero y Europa después), como un guiño para el lector avezado. Sin embargo, aunque el punto de partida es original y la narración es entretenida e interesante, desde un punto de vista de verosimilitud la historia flaquea demasiado y muchas situaciones no se las cree nadie. Además, el principal problema de este tipo de historias es cómo acabarlas, y ahí vuelve a patinar, dejando demasiado abierta la historia (quizás con ánimo de retomarla en otro libro). De cinco o cinco y medio, sobre diez.


 

54. "Corto Maltese - Samba con Tiro Fisso" de Hugo Pratt. 36 páginas (tablet).

Cuarta entrega de las aventuras del mítico personaje de Hugo Pratt, Corto Maltés. En este caso, ayuda a unos rebeldes ante el sometimiento de un coronel con mando de cacique.


 

viernes, 16 de octubre de 2020

El Premio Planeta o el negocio perfecto

El Premio Planeta es el premio literario más suculento, económicamente hablando, de las letras españolas. Se da a una obra inédita y nunca se ha repetido ganador. Entre los premiados y los finalistas desde 1952, podemos encontrar nombres incuestionables dentro del mundo literario: Ana María Matute, Ignacio Aldecoa, Torcuato Luca de Tena, Juan Marsé, Manuel Vázquez Montalbán, Terenci Moix, Gonzalo Torrente Ballester, Antonio Muñoz Molina, Camilo José Cela, Mario Vargas Llosa, Eduardo Mendoza, Juan José Millás, Lorenzo Silva o Javier Cercas. No se puede cuestionar, como sucede con el Nobel, que se trate de una lotería, precisamente. De hecho, si uno observa a los premiados desde el inicio de andadura del premio hasta el más reciente (otorgado esta semana) lo que queda claro es que se trata de una operación de marketing de manual.

En los últimos 30 años los autores que se premian son conocidos o muy conocidos, ya sea por su trayectoria literaria o por ser personajes públicos. ¿Por qué hace esto la Editorial Planeta? Por la pasta, amigos, por la pasta. Al tratarse de personajes famosos, la editorial garantiza tener un número de ventas de esos libros que no sólo compensan el premio que otorgan (601.000 € para el ganador y 150.250 € para el finalista) sino que se convierten automáticamente en best-seller garantizados. Desde un punto de vista empresarial y de negocio es una maniobra perfecta. Lanzan un premio (marketing) y lo monetizan automáticamente con un margen más que considerable (negocio).

¿Y la calidad literaria? Bueno, esa es otra historia, obviamente. Incluso los libros de escritores de verdad como Eduardo Mendoza o Javier Cercas no son los mejores de su repertorio, precisamente, pero es que, ¿qué podemos esperar si premian novelas de periodistas o famosillos con una trayectoria literaria escasa o nula? El mejor ejemplo es el de las premiadas de este año. La ganadora, Eva García Sáenz de Urturi, es la típica autora de best-sellers (como Matilde Asensi, Julia Navarro, María Dueñas y demás) que además pertenece a la casa (sus libros los edita Planeta desde hace años), con lo que es una apuesta segura, ya que garantizas los lectores de la escritora y añades a los que se fijan en el premio. Pero lo mejor es lo de la finalista, Sandra Barneda, actual presentadora del reality "La isla de las tentaciones", a la que nadie en su sano juicio podría darle un premio literario de este calibre económico. Pero claro, se une a la moda de periodistas con nombre que publican libros aprovechándose de su fama (Máxim Huerta o Mara Torres me vienen a la cabeza, aunque Ana Rosa Quintana fue la pionera, perdonen la maldad) y cuyo nivel literario es, cuanto menos, sospechoso a priori. Ojo, no digo que no haya periodistas que puedan ser grandes escritores, lo que afirmo es que no puede haber tantos, y menos de ámbitos como los de Barneda o Huerta, que tienen más relación con Belén Esteban que con Almudena Grandes.

Si este tema de usar a famosillos para vender libros huele un poco mal, hay otros rumores en relación al Premio Planeta que hieden. Por ejemplo, Delibes afirmando en 1994 que le habían llamado varias veces para participar, siempre garantizando el premio (el artículo, curiosamente, es de Enric González, cuyo padre ganó el Planeta en 1984), o Ernesto Sábato afirmando lo mismo, un premio que terminó ganando Camilo José Cela con una obra que fue acusada de plagio. Hace casi 25 años, Manuel Vázquez Montalbán publicó "El premio", en el que satirizaba una entrega de premio literario (con asesinato incluido que debía resolver el genial Pepe Carvalho) y afirmaba usar parte de su experiencia como ganador del Planeta. 

En cualquier caso, lo que sí queda claro, polémicas al margen, es que en el mundo literario el Premio Planeta es el negocio perfecto.



jueves, 8 de octubre de 2020

El Premio Nobel de Literatura o la lotería de los escritores

Hoy se ha anunciado que el Premio Nobel de Literatura de 2020 es para Louise Glück, sí, claro la poetisa americana, ah, ¿no te suena? Pues no, oiga, no me suena. Igual que no me suenan (ni me sonaban) Peter Handke u Olga Tokarczuk. Es como si la Academia sueca hubiera decidido volver a la senda de los escritores desconocidos después de habérselo entregado a Kazuo Ishiguro y Bob Dylan en dos años consecutivos.

Da la sensación de que el Nobel tiene que cumplir con una serie de requisitos absurdos que para nada tienen que ver con la Literatura, como la raza, el sexo, o la religión del escritor o escritora. ¿Cuánta gente ha leído a Louise Glück? Porque no me molesto ya en preguntar cuánta gente la conocía esta mañana antes del anuncio. ¿Cuál es el objetivo del Premio Nobel de Literatura? ¿Qué premia? Porque según la Academia, el premio es para escritores que sobresalen por sus contribuciones en el campo de la Literatura. ¿Cómo puede contribuir alguien a la Literatura si lo leen cuatro personas?

No digo que haya que premiar a los escritores más leídos, válgame Dios, ni Ken Follett ni Pérez-Reverte tienen calidad literaria como para ser premiados en nada, pero, ¿por qué hay que buscar a personajes de nicho? ¿Por qué han de ser de países remotos o de situaciones pintorescas? ¿Por qué se habla más de lo exótica que resulta su elección que de los libros que ha escrito? Pues porque nadie los ha leído.

El Premio Nobel se ha convertido en la lotería de los escritores, dado que todos tienen las mismas opciones de ganarlo, ya seas el ínclito eterno aspirante Haruki Murakami o una escritora de Papúa Nueva Guinea que sólo escribe en lengua local. Eso sí, el premio gordo se lo lleva la editorial que tenga al premiado, porque sólo con la curiosidad se venden muchos libros. ¿Es eso de verdad lo que quieren premiar?


 

jueves, 1 de octubre de 2020

Libros Leídos Septiembre 2020

Septiembre dijo adiós ayer y hoy hay que reseñar las lecturas realizadas en tan temible mes del año (este año más). Ha sido un mes relativamente prolífico (en circunstancias normales sería pobre, pero desde la pandemia nada es igual), con seis lecturas (cuatro en español, una en inglés y otra en italiano) de las cuales tres fueron cómics, otra fue un relato autobiográfico, otra un repaso histórico del rugby y la última una novela. Siguiendo con la numeración de libros leídos durante el año, tenemos:

45. "Con fina desobediencia" de Fermín de la Calle. 312 páginas.

Fermín de la Calle es un periodista deportivo de amplia trayectoria, conocido por su amor al rugby, deporte que practica y sigue. Este libro es buena prueba de ello, ya que se trata de una especie de manual para los legos en esta materia. En sus páginas nos encontramos un interesante compendio de historia, anécdotas y funcionamiento del juego, todo ello contado de manera entretenida e interesante. De las palabras del autor en este libro uno saca dos conclusiones: que cuando uno está apasionado por algo lo cuenta con un entusiasmo aleccionador, y que al terminar de leer "Con fina desobediencia" tienes muchas ganas de ver un partido de rugby en directo, para poder disfrutar de las melés y los rucks, de la haka de los All Blacks, de la dureza de los Springbocks sudafricanos o del rugby champán de los franceses, en definitiva, de convertirse en seguidor de un deporte lleno de cosas de las que aprender. Muy bueno.

46. "Spider-Man Noir: The Complete Collection" de David Hine y otros autores. 264 páginas.

Normalmente los "que pasaría si" (el "what if" de los americanos) suelen tener el atractivo del cambio en la puesta en escena de una historia que el lector ya conoce. Sin embargo, estas historias suelen terminar siendo manidas y repetitivas, y sólo se quedan con ese atractivo inicial. En Spider-Man Noir no es así. Es cierto que los personajes son los mismos más o menos, pero la adaptación a la época posterior al Crack del 29 y previa a la II Guerra Mundial es fantástica por dos motivos fundamentales: le da contexto a los poderes de superhéroe y villanos (lo que le da más realismo) y las tramas son de auténtica intriga noir. El resultado es un cómic mucho mejor de lo que pueda parecer a priori, tanto, que lo que apena es que no se le dé más carrete del que se le da en arcos argumentales de tiradas mensuales de cómics.

47. "Libro de familia" de Galder Reguera. 384 páginas (e-book).

"Mi padre murió el día en que mi madre le dijo que estaba embarazada de mí". Así comienza la historia que Galder Reguera nos cuenta en "Libro de familia", un relato, como digo, que se inicia con la muerte del progenitor al que nunca conoció en un accidente de tráfico en la Nochevieja de 1974. Es el punto de partida de un viaje atrás y adelante de la vida del propio Reguera en relación, ya no sólo a su padre, sino a toda su familia, narrando todas las cosas buenas y malas que ocurrieron antes y después de ese trágico hecho. De alguna manera esta historia reivindica el viejo refrán de "en todas las casas cuecen habas" mostrando no sólo las alegrías y los buenos momentos, sino la crudeza impactante de los malos ratos. Reguera hace un ejercicio de honestidad brutal verdaderamente admirable, no sólo por narrar situaciones que permanecen en la caja fuerte de todas las familias, sino por reflexionar y evaluarse a sí mismo al afrontar esas situaciones. Es imposible que el lector no empatice con su narración porque, aunque las cosas que cuenta no tienen por qué habernos pasado, la manera de afrontarlas sí encuentra fácil similitud en cómo nos comportamos el resto con nuestras propias "habas". "Libro de familia" es una historia dura y a la vez muy bonita, con una prosa cercana y accesible, con un estilo franco y que llega fácilmente al lector. Al terminar el libro, sientes ganas de dos cosas: darle las gracias a Galder Reguera y desearle felicidad, porque al final es como si sintieras que su familia es, de algún modo, también tu familia.

 48. "El arte de Charlie Chan Hock Chye" de Sonny Liew. 320 páginas.

Cuando uno afronta la lectura de "El arte de Charlie Chan Hock Chye" sin ningún tipo de información previa, la agradable sorpresa que se lleva según avanzan sus páginas crece de manera exponencial. En este libro, Sonny Liew utiliza la figura de (atención que voy a desvelar algo importante) un ficticio autor de cómics de Singapur para contar la historia del país desde el fin del colonialismo británico hasta el siglo XXI. Si conocer la historia de Singapur ya resulta interesante (pasó de aldea de pescadores a ciudad-estado potencia económica en cuestión de décadas) y amena a través de un cómic, Liew consigue darle un giro más profundo, atrevido y original al enlazarla con las vivencias del autor de cómics en su devenir artístico. De este modo, vemos cómo comienza a dibujar cómics en un ambiente humilde, con protestas y movimientos estudiantiles de fondo, y cómo la evolución de su arte y su estilo entroncan con la realidad que está viviendo en la sociedad en la que vive, con continuos cambios sociales y, sobre todo, políticos. La riqueza de estilos artísticos que muestra Liew en la ficticia obra de Charlie Chan es tan amplia que, si no lo buscas en Google, te crees por completo que dicho autor sí ha existido. Y encima, te quedas con una idea clara y concisa de qué pasó en Singapur para que sea lo que es hoy. Se trata, sin duda, de una auténtica obra maestra.

 49. "Las meninas" de Santiago García y Javier Olivares. 192 páginas.

De un modo ameno e instructivo, "Las meninas" hace un recorrido biográfico de Velázquez y de su obra cumbre, la que da título a este cómic. De este modo, vemos el devenir de Don Diego desde su Sevilla natal hasta Madrid, sus viajes a Italia, la relación con artistas coetáneos (Ribera, Murillo, Rubens, etc.), y el impacto que tuvo la obra de Velázquez en los artistas posteriores (Goya, Picasso, Dalí, etc.). Este cómic podría usarse de manera didáctica para aquellos que empiezan a estudiar Historia y, en concreto, la Historia del Arte y la figura del más grande pintor (español) de todos los tiempos.

50. "Lacci" de Domenico Starnone. 138 páginas (e-book).

¿Qué pasa cuando una pareja con hijos se separa? ¿Y si vuelven a estar juntos? ¿Es imposible pegar los trozos rotos de esa relación o hay lazos invisibles que los unen? Con ese punto de partida Domenico Starnone nos regala una historia a tres voces (las cartas de la mujer a su marido tras el abandono de éste por otra mujer, la mirada atrás del marido en la actualidad reflexionando sobre su escapada y su retorno, y el punto de vista de los hijos sobre todo lo vivido), en la que uno tiene un nudo en el estómago según avanza la lectura. Lo que se lee es muy duro pero también muy real, y es esa realidad lo que hace fantástico el libro, porque es muy sencillo ponerse en el lugar de cualquiera de los personajes y entenderlos. Da para reflexionar y hacer tertulia luego.

jueves, 3 de septiembre de 2020

Libros Leídos Agosto 2020

El fantástico mes de agosto (fantástico porque lo tengo entero de vacaciones) acabó y hay que hacer la reseña de lo leído en esos 31 días. Como suele ser habitual, es el mes en el que menos leo (voy a contracorriente de la mayoría, lo sé), pero es cierto que este agosto ha sido especialmente pobre. Dos libros (uno en inglés y otro en italiano) y nada más que contar, fuera de que en septiembre caerán bastantes más (espero). Siguiendo con la numeración de libros leídos durante el año, tenemos:

43. "Speaking with the Angel" de VV.AA. (editor Nick Hornby). 240 páginas.

Con el objetivo de recaudar fondos para el tratamiento de niños con autismo, Nick Hornby (que tiene un hijo autista) realizó la compilación y edición de los doce relatos de este libro. No tienen una temática común, fuera de haber sido escogidos por Hornby. Yo destacaría el primer relato, de Richard Harris (cuñado de Hornby), el relato del propio editor y, un escalón por debajo, los de Irvine Welsh y Colin Firth (el único no escritor del elenco). El resto... Ni frío ni calor.


44. "Il re dei giochi" de Marco Malvaldi. 192 páginas (e-book).

La tercera entrega de los crímenes del BarLume no defrauda con respecto a las anteriores. Como sucedía en aquellas, la resolución del asesinato queda en un segundo plano y sirve de buena excusa para dirigir el devenir de lo que ocurre en el bar con sus parroquianos. Massimo, el dueño del bar, su camarera Tiziana y, sobre todo, el abuelo de Massimo y sus amigos de la tercera edad hacen de estas historias cercanas un rato muy agradable y divertido para el lector.



jueves, 20 de agosto de 2020

Nueve años sin tener billete

Hoy, el día del cumple de mi amigo J. y el de la efeméride del desastroso accidente de Spanair, se cumplen nueve años desde que publiqué mi primer post en este blog. Parece mucho tiempo, y lo es, porque me me han pasado muchas cosas en todos estos años, pero a la vez todo ha pasado muy rápido, no sé explicarlo muy bien. Y el blog siempre estuvo ahí. Cuando lo empecé fue la vía de escape que usé para salir de una situación personal muy muy dura, pero poco a poco se ha quedado como algo que tengo ahí, donde puedo volcar mis inquietudes, mis reflexiones, mis análisis... Mis chorradas, vamos. El caso es que, lo digo ahora, lo decía antes y lo diré siempre, escribo para mí. Si a alguien le gusta lo que lee, fantástico, y si no o nadie lo lee excepto yo, fantástico también. Porque este blog, aunque parezca una estupidez, me salvo un poco la vida.


Este año no puedo decir que estoy en Vietnam o en Tailandia cuando se publica esto. Estoy en Madrid, de vacaciones pero sin plan (han operado a mi madre de la mano y se ha jodido la semana en la playa con la familia). Consecuencias del coronavirus dichoso que vino a nuestras vidas para cambiarlas del todo. A mí, desgraciadamente, estos meses de confinamiento no me han provocado escribir más (oportunidad desperdiciada, claramente) y he aumentado los posts publicados a 513 (con éste), que es un valor respetable en cantidad pero mediocre si ves el tiempo que ha pasado. Lo que sí tengo claro es que, escriba poco o mucho, no voy a dejar este blog (para empezar porque sigo leyendo y me gusta mucho hacer ese resumen mensual), y creo que los próximos meses podré dedicarle algo más de tiempo (creo que no voy a viajar por trabajo en bastante tiempo). Veremos.


Soy Rísquez y llevo nueve años sin tener billete.

sábado, 1 de agosto de 2020

Libros Leídos Julio 2020

Julio (el mejor mes del año) acabó ayer y hoy comienzo mis vacaciones (nada de destinos exóticos esta vez, no está el horno para bollos), así que mejor si dejo los deberes hechos en lo que se refiere a las reseñas de lo leído los últimos 31 días. Han sido únicamente tres libros (uno en español, otro en italiano y otro en inglés), algo normal en esta época tan triste de lecturas (espero que esto cambie). Siguiendo el listado de libros leídos durante el año, tenemos:

40. "Un caballero en Moscú" de Amor Towles. 512 páginas (e-book).

Tras la llegada de los bolcheviques al poder, un aristócrata ruso es condenado a vivir el resto de su vida bajo arresto domiciliario en el Hotel Metropole de Moscú. Ese es el punto de partida de la preciosa historia del conde Aleksander Rostov y, aunque ya es de por sí original, el lector no sabe de lo que va a disfrutar hasta que se zambulle en sus páginas. No sabe cómo es de peculiar este caballero, cómo son las amistades que tiene en ese momento y las que adquiere con el tiempo, no sabe cómo es el devenir de alguien que vive en un hotel y menos en la Rusia de aquella época. El lector sólo sabe que ese inicio ya lo predispone a leer algo bueno. Y es así. "Un caballero en Moscú" es una delicia de lectura, una de esas historias que te reconcilia con la vida porque está contada de una manera dulce y tierna, incluso cuando lo que ocurre es tremendamente triste. Si alguien quiere pasar un buen rato leyendo y además tener una sensación de bienestar mientras lo hace, que no deje pasar la oportunidad de leer esta novela.


41. "Quaderni giapponesi. Vol. 2: Il vagabondo del manga" de Igort. 184 páginas.

En este segundo volumen de "Quaderni giapponesi", Igort salta de la experiencia como mangaka foráneo en el Japón de los 90 a un viaje más actual, en el que, aprovechando una exposición sobre su trabajo y el de su amigo Jiro Taniguchi (un grande del cómic japonés), hace un recorrido por el país. El resultado es una falsa guía de viaje, en la que el autor cuenta a dónde va y anécdotas de lo que ve, y que hace que al lector le entren unas ganas locas de viajar al país del Sol naciente. Una delicia.


42. "Leviathan" de Paul Auster. 275 páginas (e-book).

He leído todas las novelas de Paul Auster (y algunas otras obras suyas) y, desde hace algún tiempo, estoy releyendo en su versión original aquellas que leí traducidas. Llevaba tiempo queriendo leer "Leviathan" por el recuerdo de la sensación que tuve al leerla, que fue la de algo extraordinario. Es curioso, no recordaba nada de la historia exceptuando el principio (que el amigo del narrador se ha matado al manipular una bomba) y la historia de cómo se hacen amigos, pero la sensación de su lectura permanecía intacta. Al releerla, no la veo perfecta, pero me sigue pareciendo una gran novela. Se ven en ella rasgos característicos de las historias de Auster: escritores, literatura dentro de literatura, casualidades azarosas que devienen hechos fundamentales para los personajes... Lo que más me gusta de estas novelas suyas es que parecen matrioskas, con una historia que esconde otra historia, que a su vez esconde otra historia... Y este libro es un paradigma de ello. El resultado es una historia entretenida, muy fluida y bien escrita, a la que quizás le faltan un par de detalles para conseguir ser magnífica.

viernes, 31 de julio de 2020

"Un guardia civil" de Josele Santiago

Hoy es viernes... Y toca canción. Concretamente se trata de "Un guardia civil", del cantante de "Los Enemigos", Josele Santiago, perteneciente a su disco "Transilvania" de 2017.

Esta canción la descubrí gracias al programa de la SER, "A vivir que son dos días", donde el gran Javier del Pino pone una música alucinante, además de tener el mejor programa de la radio española. No recuerdo ni siquiera en qué sección fue, pero los días siguientes la primera estrofa seguía retumbando en mi cabeza, repitiéndose como un mantra. De hecho, un compañero de esgrima la tarareaba en el vestuario y le dije: "tú escuchaste el A vivir". Me dijo que sí, pero que era fiel seguidor de Josele y de Los Enemigos. Yo no, me sonaban de nombre pero no recordaba haber oído ninguna canción suya. Y sin embargo ésta...


La melodía es simple y bonita, pero es la letra la que te impacta. Parece un cuento, una historia que es muy fácil de imaginar, y Josele consigue que te metas en ella como si fuera una película y tú el protagonista enfrente del guardia civil. Decía su autor que es un blues carcelario basado en un sueño que tuvo y del que sacó la letra aún antes de tener la música. No me extraña. La letra es muy muy potente, imposible que te deje indiferente.


Quizás la mejor anécdota de todo esto sea lo último que cuente. Josele Santiago es de Puerta del Ángel, como yo, de la calle Caramuel... Y lo conoce toda mi familia paterna, tanto, que incluso la madre de Josele decía que se dedicó a la música por mi tío G. que tenía un grupo (al menos eso cuenta mi abuela). Qué cosas tiene la vida, la verdad sea dicha.

Como siempre, pongo un par de vídeos y la letra a continuación.




Un guardia civil
Me ha tirado las llaves las suyas de abrir
Las tengo aquí
A mi vera podría salir
Ser libre al fin
Vivir para siempre feliz
Estar junto a ti
Pero el guardia me apunta con su fusil
Es de doble cañón
Dos cañones mas negros que yo
Sólo esta prisión
Es más negra y las llaves brillan al sol
Las miramos los dos
Y miramos también al portón
Ni el guardia ni yo
Olvidaremos nunca este calor
Es el dedo de Dios
El que aprieta el gatillo o no
Son sus pies los que yo
Voy arrastrando hacia el portón
Un trueno en el sol
He oído y creído tu voz
Qué bueno señor
Es sentir en las tripas todo tu amor

martes, 14 de julio de 2020

Rísquez cumple 39... Como Indy en el Arca

En 1981, el año en el que nací, se estrenó la primera de las películas del arqueólogo aventurero que siempre va acompañado de su Fedora, su chupa y su látigo, el gran Indiana Jones. Entonces Harrison Ford cumplió 39 años, y lo hizo el 13 de julio (casi casi) de hace 39 años ahora, casualidades de la vida. Hace cuatro años hice referencia al bueno de Harrison haciendo paralelismos con el momento en el que cumplió 35 años y encarnó a Han Solo, y el momento en el que yo los cumplía. En esta ocasión no existe paralelismo alguno, Ford con 39 años ya era una estrella confirmada y no un desconocido, y su carrera estaba despegando hasta convertirse en lo que fue: el actor de más éxito de los años 80 e inicio de los 90, protagonizando una serie de películas inolvidables. Yo, obviamente, no estoy en esa senda, pero siendo Indy mi personaje de ficción favorito, ¿cómo no iba a hacer la referencia? Así que... Happy birthday to me.









miércoles, 8 de julio de 2020

Libros Leídos Junio 2020

Junio nos dejó hace más de una semana, así que ya es hora de hacer reseña de las pocas lecturas realizadas en el mes que despide la primavera y da entrada a la estación más guay del año, el verano. Digo pocas y es lo que son, porque cinco libros (tres en inglés, uno en español y otro en italiano) es poco. Han sido cuatro cómics y una novela, dejando claro lo poco que he leído. Esto de la pandemia ha hundido mis registros de los primeros meses del año, como se puede ver en la numeración de los libros leídos hasta ahora:

35. "Pride of Baghdad" de Brian K. Vaughan. 136 páginas (tablet).

El creador de Saga o Y: The last man, el famoso y premiado Brian K. Vaughan, es el responsable de esta fábula sobre la guerra de Irak en la que usando un hecho real (cuatro leones se escaparon del zoo de Bagdag en plena ofensiva americana), construye una historia a modo de metáfora de la propia situación de Irak en ese momento. La trama es entretenida y original, pero también un poco previsible (entiendo que no da más de sí). Eso sí, me ha gustado mucho el "making of" de la obra en las páginas finales.


36. "Rewind" de Juan Tallón. 216 páginas (e-book).

Un edificio explota en Lyon, haciendo trizas el piso que comparten unos jóvenes estudiantes. Ese es el punto de partida que usa Juan Tallón para contarnos la vida antes y después de tan impactante incidente para aquellos que lo sufrieron directa o indirectamente. A través de capítulos narrados en primera persona por diferentes personajes, el lector va componiendo el puzle de la historia que Tallón quiere narrar. Todo casa tan bien, parece tan real, que si no fuera por el estilo (esa primera persona) y el formato, podría uno pensar que se trata de un trabajo periodístico sobre un hecho relevante. Muy buen libro. 


37. "X-Men: Mutant Genesis" de Chris Claremont (entre otros). 192 páginas (tablet).

Una obra ya clásica para los aficionados a los cómics de superhéroes, en la que aparecen, además del grueso de los X-Men (Cíclope, Bestia, Jean Grey, Tormenta, Gámbito, Lobezno...), Magneto y sus ganas de imponer su criterio de superioridad mutante sobre los humanos, y un resucitado Omega Red que hace despertar recuerdos enterrados en la memoria de Lobezno. Entretenido.


38. "5 è il numero perfetto" de Igort. 166 páginas.

En Italia a las obras de misterio se les llama "giallo" porque el amarillo era el color de la edición de los clásicos libros de serie negra (el "noir" francés, todo con colores). Pues éste es un giallo italiano de los pies a la cabeza, porque responde a las características clásicas del género (asesinatos, intriga, etc.) con una puesta en escena y unos personajes que son puramente italianos. La historia es entretenida y el diseño acompaña perfectamente a la historia. Muy buen cómic, del que se ha hecho película.


39. "Liebestrasse" de Greg Lockard (entre otros). 98 páginas (tablet).

Un americano experto en arte, ya maduro, viaja a Berlín en 1952 por trabajo y rememora la época en la que vivió en esa ciudad cuando los nazis acababan de tomar el poder. Allí, en clubes clandestinos, conoció el ambiente más que desenfadado de la noche berlinesa y al amor de su vida. Obviamente, el amor homosexual hace que el desenlace de esa historia de amor sea previsible, pero la historia está bien construida y contada, y la ambientación no está mal. Sin embargo, tras haber leído la trilogía de Berlín de Jason Lutes, esta obra se ve bastante menor en la comparación.

martes, 23 de junio de 2020

"23 de junio" de Vetusta Morla

Hoy es martes... Y toca canción. De hecho, no es un martes cualquiera, es 23 de junio, el día más largo del año, el de las hogueras de San Juan. Un día y, sobre todo, una noche muy especiales, tanto como para tener libros (recuerdo uno de Clara Usón) o canciones dedicadas, como la que traigo hoy por aquí. Se trata de, valga la redundancia, "23 de junio" de los madrileños Vetusta Morla, una canción de su disco "Mismo sitio, distinto lugar" de 2017 (revisitado ahora con MSDL, el disco de 2020 con las mismas canciones tocadas de diferente manera), en la que se hace un homenaje a este día tan especial.

De esta canción, los amigos de Vetusta dijeron: “Es un vals retrofuturista cargado, a partes iguales, de folclore y manipulación sonora. Es un baile atemporal. Tiene aroma de canción popular convertida en un ritual de paso, como si se tratase de una celebración ancestral que nos invita a pasar ligeros y con valentía, sin la carga del equipaje que todos llevamos encima.”

Creo que no hay mejor manera de definirla, la verdad sea dicha, yo sólo añadiría que es un temazo. Y si ves el videoclip original, te convence del todo. Como siempre, pongo unos videos (el original y la nueva versión) y luego la letra de la canción. Y ya sabes, deja el equipaje en la ribera...




Antes del frío levanta las velas
Guarda en tu falda los granos de arroz
Y haz ceremonias de luna llena
Antes del frío, lánzamelos
Cuida este vals que tenemos en vena
Cuida del baile y riega el salón
Lleva la barca hasta la albufera
Y pon el verano en un mostrador
Y que San Juan no nos queme en su hoguera
Cuando descubra quién la asaltó
Deja el equipaje en la ribera
Para verte como quieres que te vea
Deja el equipaje en la ribera
Y quémalo
Haz que este baile merezca la pena
Yo haré lo propio con esta canción
Y si al final no hay más que comedia
Deja que el río nos lleve a los dos
Y que San Juan no nos queme en su hoguera
Ni haga de esto un negocio menor
Cruza los dedos por mí
Y antes de que vuelva a mirar
Busca el viento a favor
Y deja el equipaje en la ribera
Para verte como quieres que te vea
Sabes que todo está bien
No hay error
Deja el equipaje en la ribera
Para verme como quiero que me veas
Lánzate al agua otra vez
Aquí espero yo
Deja el equipaje en la ribera
No te sirve cuando cruzas la frontera
Todo está en regla esta vez
No hay error
Deja el equipaje en la ribera
Para verte como quieres que te vea
Deja el equipaje en la ribera
Y quémalo

lunes, 1 de junio de 2020

LIbros Leídos Mayo 2020

Hoy empezamos mes y toca poner en orden lo leído en mayo. Han sido 7 libros, que podría ser una cifra respetable si no fuera porque en realidad dispongo de más tiempo para leer que el que le dedico y la mayoría son cómics. No consigo ponerme a leer con la concentración y dedicación que tengo cuando viajaba en metro al trabajo en la "vieja normalidad", y sólo soy capaz de hacerlo por la noche, cuando debería estar durmiendo. Pese a todo, he sacado tiempo para leer esos siete libros (cuatro en español, dos en inglés y uno en italiano), de los cuales cuatro cómics, una novela, un libro de entrevistas y una biografía futbolera. Siguiendo con la numeración de libros leídos durante el año, tenemos:

28. "Xerxes The Fall of the House of Darius and the Rise of Alexander" de Frank Miller. 112 páginas (tablet).

Pobre continuación de 300, en la que Frank Miller trata de repetir el éxito original mezclando parte de precuela y la historia de Alejandro Magno. Es muy corto como para poder contar algo que no sean batallas violentas, y la originalidad de la primera entrega queda diluida al ser más de lo mismo y con peor trama. Mediocre.


29. "Una forma de permanencia" de Marta San Miguel. 144 páginas.

Para los que se pregunten si el fútbol tiene espacio en la literatura, he aquí una clara respuesta: sí. Y como ejemplo este libro. Además del juego en sí, el fútbol tiene mucho que ver con la vida (la relación padres e hijos, la fe en algo, la fraternidad con un extraño...) y, por ende, con la literatura. En "Una forma de permanencia", Marta San Miguel nos habla de su racinguismo, pero también de su infancia en los 80, de su padre, de su pareja y, sobre todo, de Santander. Éste es un libro sobre la vida, sobre el fútbol y una bella guía de Santander. Se hace muy corto leerlo, con eso está todo dicho.




30. "La terra dei figli" de Gipi. 288 páginas (tablet).

En un futuro apocalíptico en el que la civilización se ha desmoronado (ríete del coronavirus), un padre y dos hijos sobreviven semiaislados y de mala manera tras un hecho que no se nombra pero que cambió la realidad radicalmente. Los chavales no conocen otro mundo diferente al que viven, en el que pescan y cazan perros para comer, en el que apenas tratan con nadie, y en el que la única ley es la obediencia al padre. Sin embargo, un suceso cambia la situación y se ven obligados a comenzar a tomar ellos las decisiones. Esta obra recuerda mucho a "La carretera" de Cormac McCarthy, parece exactamente el mundo que recorrían aquellos dos personajes y, de alguna manera, funciona como si fuera su continuación. El ritmo es trepidante y Gipi maneja las virtudes de imagen del cómic de manera fantástica (el momento en el que uno de los chavales trata de leer un libro sin saber leer está hecho de manera fantástica), se trata de un gran libro.


31. "Lamia" de Rayco Pulido. 88 páginas (tablet).

Con esta obra, Rayco Pulido ganó el Premio Nacional del cómic, una distinción nada baladí dado el nivel de algunos de sus ganadores (Paco Roca, Altarriba, Alfonso Zapico...). Quizás por eso mis expectativas eran bastante altas, y he quedado un poco defraudado. La historia es original (una asesina en serie que campa por la Barcelona de 1943), la trama es entretenida, y la ambientación muy buena (su diseño de escuadra y cartabón sumado al blanco y negro también ayudan). Sin embargo, la presencia del detective hipnotizador resta credibilidad (no parece serio) y la carencia de argumentos para que éste sospeche de Laia hacen que el nivel del cómic baje bastante. Le daría un 7 sobre 10.


32. "The Fall" de Ed Brubaker y Jason Lutes. 48 páginas (tablet).

En esta obra se juntan dos auténticos cracks del mundo del cómic, creadores de obras maestras como Sleeper (Ed Brubaker) o Berlín (Jason Lutes). En esta historia se ven claros los roles: el guión es un ejemplo claro de la mano de Brubaker con una historia de suspense, intriga y género negro, mientras que el dibujo en blanco y negro, conciso y claro es responsabilidad de Lutes. Un gran cómic, aunque se hace muy corto, da la sensación de que el doble de espacio habría permitido un resultado mucho más completo y redondo.

 
33. "And Here's the Kicker: Conversations with 21 Top Humor Writers on their Craft and the Industry" de Mike Sacks. 337 páginas (e-book).

Mike Sacks recopila en este libro una serie de largas entrevistas con representantes del humor en varias de sus formas: escritores, guionistas, autores fe cómics... Además de conocer a humoristas que no conocía, también resulta curioso ver que, incluso funcionando en una longitud de onda parecida que les hace tener cosas en común, cada uno es de su padre y de su madre. Si tuviera que destacar una, me pareció muy interesante la entrevista a Dan Mazer, el colaborador habitual de Sacha Baron Cohen en "fechorías" como Ali G, Borat o Bruno.


34. "La madre de Frankenstein" de Almudena Grandes. 560 páginas (e-book).

Este libro es el quinto de la serie que Almudena Grandes está dedicando a historias de la posguerra y que, en honor a Pérez Galdós, ha llamado "Episodios de una guerra interminable". El nexo común de todas esas historias (además de la aparición de personajes protagonistas de algún libro como secundarios en otros) es la denuncia del tipo de país que era España en la dictadura franquista. Un país gris, retrógrado, clasista, cruel con el diferente y con el débil, cutre, rancio y casposo, el fiel reflejo de lo que no debe ser una sociedad (al menos bajo mi punto de vista). En este caso, aprovechando la historia de Aurora Rodríguez Carballeira (la madre y asesina de la niña prodigio Hildegart) y su estancia en el manicomio de mujeres de Ciempozuelos, Grandes nos muestra esos retazos de miserabilidad de la sociedad española de la época a través de la vida y del trabajo del psiquiatra Germán Velázquez y de la relación de éste con la auxiliar María Castejón. La novela es entretenida. está muy bien hilada (como pasa con toda la obra de Almudena Grandes), y aunque es cierto que no resulta tan apasionante como alguno de los otros libros de esta serie (los dos primeros son excepcionales), se trata de una buena historia.


miércoles, 13 de mayo de 2020

"Lonely Boy" de The Black Keys

Hoy es miércoles (sí, miércoles, porque con el confinamiento da igual qué día sea) y toca canción... Concretamente un temazo de la banda The Black Keys (me extraña no haberlo puesto antes por aquí) que se llama "Lonely Boy" y pertenece a su álbum "El Camino" de 2011. Es una canción muy conocida porque se ha usado en multitud de situaciones (anuncios, espectáculos, programas, videojuegos...).


¿Qué tiene esta canción para ser un "hit"? Pues básicamente el riff de guitarra del principio (y que se repite posteriormente) que la hace reconocible al instante, y en general todo el ritmo de la canción, que se queda en la cabeza tiempo después (es de esos que tarareas sin darte cuenta). La letra ni fu ni fa (se puede ver, como siempre, después de los vídeos), pero la melodía se te graba en la mente por completo.

El otro día, en uno de los paseos que he dado desde que nos dio permiso el Gobierno, iba caminando y escuchando la lista aleatoria de la música del móvil, y saltó esta canción. En cuanto sonó pensé "coño, es Lonely Boy" y me dije... Como yo, un chico solitario en tiempos de coronavirus, así que me dije "esta va al blog". Y aquí está. Espero que, si alguien pasa por aquí y no la conocía, que la disfrute.




Well, I'm so above you, and it's plain to see
But I came to love you anyway
So you pull my heart out
And I don't mind bleeding
Any of the time you keep me waiting, waiting, waiting
Oh, oh, oh, I got a love that keeps me waiting
Oh, oh, oh, I got a love that keeps me waiting
I'm a lonely boy
I'm a lonely boy
Oh, oh, oh, I got a love that keeps me waiting
Well, your mama kept you, but your daddy left you
And I should have done you just the same
But I came to love you, am I born to bleed?
Any of the time you keep me waiting, waiting, waiting
Oh, oh, oh, I got a love that keeps me waiting
Oh, oh, oh, I got a love that keeps me waiting
I'm a lonely boy
I'm a lonely boy
Oh, oh, oh, I got a love that keeps me waiting
Oh, oh, oh, I got a love that keeps me waiting
Oh, oh, oh, I got a love that keeps me waiting
I'm a lonely boy
I'm a lonely boy
Oh, oh, oh, I got a love that keeps me waiting

martes, 5 de mayo de 2020

Libros Leídos Abril 2020

Abril terminó la semana pasada y ya es hora de hacer reseña de las lecturas realizadas. Ha sido un mes bastante extraño, porque el confinamiento lo condiciona todo. No estoy leyendo ni la cantidad de tiempo habitual, ni las horas habituales, ni siquiera las lecturas habituales. Hacía mucho mucho tiempo que no me pasaba que en un mes no leyera ninguna novela. Las lecturas, como decía, fueron pocas, sólo cinco libros (dos en español, dos en inglés y uno en italiano), de los cuales dos fueron cómics, dos libros futboleros y el otro es una recopilación de artículos periodísticos. Siguiendo la numeración de libros leídos durante el año, tenemos:

23. "Héroes, aventureros y cobardes" de Jacinto Antón. 476 páginas.

Una de las mejores cosas que tiene el diario El País es poder leer con frecuencia a Jacinto Antón en las páginas de cultura. Sus artículos son un derroche de curiosidad y conocimiento, en los que se mezclan literatura, guerras, animales o científicos, siempre narrados con gracia y originalidad. En este volumen se recopilan algunos de los muchos artículos que ha publicado en sus más de 30 años de periodista. Es altamente recomendable.


24. "La balada del bar Torino" de Rafa Lahuerta Yúfera. 225 páginas.

Sobre este libro ya hablé aquí.


25. "Black Widow: Deadly Origin" de Paul Cornell (guionista), Tom Raney, John Paul Leon y Adi Granov (ilustradores). 112 páginas (tablet).

Floja historia en la que se explican los orígenes de Black Widow y se hace más un repaso de sus múltiples amantes que una narración de sus aventuras. Pobre trama y aburrido devenir de los acontecimientos.


26. "The Boys, Volume 1: The Name of the Game" de Garth Ennis y Darick Robertson. 152 páginas (tablet).

En Watchmen surgía la pregunta: Who watches the watchmen? Pues bien, The boys es la respuesta. En un mundo con una cantidad considerable de superhéroes que campan a sus anchas y funcionan como una compañía privada, sólo un grupo de mercenarios contratados por la CIA les hace frente. Sus métodos no son los más refinados (priman la violencia y la extorsión) pero la verdad es que el resultado es divertido y original. La serie que se ha hecho en base a estos cómics también es recomendable.



27. "Pistole e palloni: 12 maggio 1974: il primo scudetto della Lazio nel cuore degli anni Settanta" de Guy Chiappaventi. 240 páginas.

En este libro, el periodista y escritor Guy Chiappaventi, confeso tifoso laziale, describe cómo fue la Lazio que ganó el Scudetto en la temporada 1973/74. La Lazio de las pistolas. En los diferentes capítulos, centrados en cada uno de los titulares de aquel equipo y en el entrenador Maestrelli, se cuentan las mil y una anécdotas que surgieron en un grupo tan salvaje: los dos clanes enfrentados (el de Chinaglia por un lado y el de Martini por el otro), la vitola de fascistas que se les cargó (no sin razón en bastantes casos, y la Lazio históricamente no es un equipo de izquierda, precisamente), el asesinato de Re Cecconi en una supuesta broma en una joyería, la costumbre de llevar pistolas y sacarlas a relucir en bastantes ocasiones... El libro está bien contado, es entretenido y, además del toque futbolero, tiene una cosa que me ha gustado mucho, y es que, para dar contexto, cuenta muchas cosas significantes de la época que narra (la votación del aborto, los atentados de las Brigadas Rojas, los años de plomo, los vaivenes políticos...). Recomendable.

miércoles, 29 de abril de 2020

Descansa en paz, Robin

Ayer nos dejó Michael Robinson. Sé que muchas veces se habla de esta forma sobre algún famoso que fallece, diciendo "nos dejó", como si fuera alguien que conociéramos en persona o fuera incluso cercano como familiares y amigos. Pues bien, en este caso creo que no podría expresarse mejor, porque todos en este país teníamos a Robinson como alguien así, alguien con el que te sientas en el salón de tu casa a cenar, con el que quedas a unas cañas, alguien que te cuenta historias maravillosas, y siempre con sonrisa y buen humor.


Michael Robinson fue un jugador de fútbol con una carrera regular, aunque jalonada de éxitos que no todo el mundo puede conseguir: jugar en el mejor equipo de Europa de la época (el Liverpool), ganar la Copa de Europa, ser internacional (con Irlanda, porque sus abuelos maternos eran irlandeses) o jugar en el extranjero (en Osasuna). Cuando su carrera futbolística terminó, los medios de comunicación fueron su siguiente destino, y fue a partir de entonces cuando comenzó a ganarse el corazón de todos.

Hay una cosa que me encanta de ser madrileño y es que no hace falta haber nacido aquí para serlo. Con Robinson podríamos decir lo mismo respecto a su españolidad, no nació aquí y su gracioso español con acento lo delató siempre, pero es un personaje español a todos los efectos. Le gustaba la conversación, reunirse con amigos, el fútbol y los deportes, comer, beber y disfrutar de la vida... ¿Se puede ser más español que eso?


Cuando Robinson llegó a El día después yo tendría diez u once años, entonces Canal + tenía pocos programas en abierto y ese era uno de ellos. Toda la gente de mi generación se hizo adulta viendo a "Robin" comentando partidos y analizando el fútbol con precisión, ironía, buen humor y entreteniendo. Sólo con eso ya tendría ganado el cielo para los futboleros, porque la gente no suele soportar a su inseparable Carlos Martínez o al muchas veces cargante Maldini (un ejemplo de que ver mucho fútbol no te da ni el don de entender el juego ni el de comentarlo), pero todo el mundo adoraba a Michael. Daba igual cuál fuera su equipo (él siempre fue del Liverpool por encima de cualquier cosa) porque la manera de contar lo que veía era a todas luces objetiva y sin pelos en la lengua.

"Robin" era la cara del mejor emulador que hubo en los 90, el PC Fútbol. Si pienso en la cantidad de horas que eché delante del ordenador con ese juego, es curioso, pero no recuerdo las imágenes del campo, y sí la sonriente cara de Michael en la portada. Ese espíritu suyo de bonhomía hacía que cualquier cosa en la que se embarcase lo impregnara todo, ya fuera en la tele, en un juego de ordenador, poniendo la voz a un personaje de Shrek o anunciando cualquier cosa.


Si como comentarista de partidos ya tenía un espacio en nuestros corazones (incluso el de los no futboleros, porque alguien así de simpático, de majo, de buen hombre calaba en cualquiera), cuando inició Informe Robinson ya llegó a su cénit, algo que prolongó en la Cadena SER con Acento Robinson (similar al primero, pero en la radio). Esas pequeñas piezas documentales, en las que se narra o se entrevista a figuras grandes y pequeñas (ojo a éstas) del deporte, trascienden lo deportivo y nos cuentan historias de profundo carácter humano. Para que nos entendamos, Informe Robinson es el mejor programa del mundo del deporte que se ha hecho en este país, pero es que es de los mejores programas de televisión que he visto en mi vida. Ya no es que llores viendo el Informe del Mundial de 2010 (cada vez), es que ese programa hace que me emocione con deportes y personajes que jamás pensé que podrían hacer que me emocionara. Estoy convencido de que cualquiera que lo haya visto tendrá la misma sensación que yo. Y ese programa tiene no sólo el apellido de su presentador, sino su toque, ahí radica la importancia de Michael.

Anoche, en El Larguero, uno de los compañeros de Robinson comentó que, ante el fatal desenlace que esperaba, hizo una entrevista en la que se desnudó emocionalmente. Decía este compañero que "Robin tiene un Informe" y que ya estaban trabajando en él. Espero que ese programa especial (especial en todos los sentidos) sirva como gran homenaje al enorme ser humano que ha sido Michael Robinson, que nos ha dejado excesivamente pronto y en la peor de las situaciones.

Descanse en paz. Un abrazo para familiares y amigos.