Esta semana me he terminado el quinto libro de la actualmente famosa saga (cuando la comencé la conocían sólo los friquis como mi amigo J. de la facultad y algún otro por ahí) de
"Canción de Hielo y Fuego", cuyo título es
"Danza de dragones". Como ya todo el mundo sabe ahora que hay una serie de televisión y te encuentras a cada sitio que vas a individuos e individuas de cualquier edad leyendo esos tochazos o su versión de bolsillo compacta y con letra de pulga pedorra, se trata de una historia de fantasía en la que hay un montón de personajes de todo tipo (reyes, reinas, señores, caballeros, enanos, putas, maestres, sacerdotisas, guardias célibes...), tramas variopintas que enganchan como el mejor de los culebrones, y lugares mágicos a los que sólo la imaginación te puede llevar.
Decir que es como una versión mejorada o modernizada de El señor de los anillos sería faltarle el respeto a ambas obras, básicamente porque se trata de productos fieles a la época en la que se publicaron. Si la narración de Tolkien sorprendía por su original contenido y por ser un pionero en el género de la fantasía, pero no por cómo estructuró su trilogía, la manera que tiene el autor de "Canción de Hielo y Fuego" (
George R.R. Martin, Dios no quiera que se muera antes de acabar el séptimo y último libro) de contarnos lo que sucede en el mundo de los siete reinos es quizá lo más original y lo que explica el porqué de su fama. Desde Tolkien, muchos han escrito libros en los que hubiera magia, caballeros, señores, dragones y demás, pero en la obra de George R.R. Martin nos encontramos con una serie de puntos clave que son los que explican su éxito:
1. Maneja personajes de todo tipo, no hay buenos y malos, abarca todas las gamas de grises que hay del blanco al negro, lo que hace que el lector exigente se sienta muy muy cómodo al ver que lo que lee, dentro de la más absoluta de las ficciones, es creíble.
2. No le duelen prendas a la hora de contar las tramas: si hay sexo es explícito, si hay violencia también, y así con todo. Si hay que quitarse de en medio a personajes lo hace, por muy importantes que hayan sido en la historia hasta ese momento. Eso hace que, aunque puedas prever lo que va a suceder, siempre tengas la sensación de que no sabes qué va a pasar de verdad.
3. Cada capítulo está centrado en un personaje, lo que hace que la narración se asemeje mucho a la estructura de una serie de televisión. Esta manera no lineal de contar las cosas es quizá lo más original de su propuesta y una de las cosas que más gustan al lector.
4. Los diferentes arcos argumentales que maneja son sencillamente fantásticos, enganchan a cualquier tipo de lector, dando prácticamente igual en qué personaje esté centrado cada capítulo. Además has de estar atento a todo lo que sucede en cada pequeña historia, principalmente porque aunque no lo haga de manera directa siempre entremezcla cada trama para darle consistencia a cada historia.
5. Al venir de la televisión el autor (que fue guionista de varias series durante años) no sólo ha escrito los capítulos de esa manera tan original, sino que maneja los finales con suspense o
cliffhanger de manera apoteósica, aunque deje en el lector una sensación de fastidio y un "pero será hijo de puta que me deja así" en la boca.
|
No te mueras antes de acabar George, cuídate que no te veo muy en forma |
Esta quinta entrega, que he leído en castellano porque en inglés me parecía durísimo hacerlo (lo intenté pero buscaba una de cada tres palabras, algo que no pasa nunca, y mi amigo J. el friqui me dijo "qué va, si después de las primeras 100 páginas te acostumbras a las quince palabras con las que se nombra a un caballo, o las cinco o seis con las que llaman al cuero" pero no le hice caso), me ha encantado, lo mismo que las anteriores, básicamente porque creo que se mantiene el tono de los cuatro primeros libros y pasan cosas sencillamente memorables. Lo único que espero, además de que el tipo viva para escribir el séptimo tomo, es que el final sea legendario y no pasen cosas raras. Como habéis visto, no he destripado nada, lo único que hago es recomendárselo a todo el mundo, porque por encima de que haya una serie, se trata de novelas francamente buenas.