El caso es que tengo la cancioncita en la cabeza desde hace unas semanas, desde que la escuché en su programa y he cumplido mi ritual habitual. Love of Lesbian es un grupo muy particular, comenzaron publicando discos en inglés hasta que en 2005 dieron un giro a su carrera y, siempre desde ese estilo alternativillo, empezaron a sacar trabajos en castellano y el éxito vino de la mano. He escuchado varias canciones suyas y he de reconocer que las que más me gustan son las que tienen un punto gamberro (es como si fueran de dos tipos, las cañeras y golfas por un lado y las melancólicas y de darse tarrazos por el otro) porque son muy divertidas y tienen un ritmo que se te mete en la sesera. Eso sí, también hay que destacar la voz del cantante (Santi Balmes), que es muy característica y resulta inconfundible sea cual sea el tipo de canción, lo que ayuda a distinguir a Love of Lesbian allá donde los escuches. Bueno, como siempre pongo unos vídeos (uno de ellos es un videoclip no oficial hecho por un aficionado y es bastante simpático) y luego la letra de la canción. A disfrutarla.
Se instaló en el ático hace un mes,
creí que hablaba al revés,
pero Marlene era de Ucrania.
Pronto aporreaba en su portal,
del todo preso de ansiedad,
culpa de mis circunstancias.
Acordé una cita con Marlene,
creí que le iba a sentar bien,
ver mi transformación.
Para conseguir un gran impacto,
escondí con sumo tacto
mi medicación.
Tengo una crisis para ti,
ya empieza el show
de las sesenta voces.
Y si te como en el parqué,
fiesta con mis vocecillas, ¡qué ilusión!
Hay un Phil Collins en mi cabezón.
Llaman a la puerta, ¿serás tú?
Pues sí, resulta que eras tú,
cómo son las circunstancias.
No vas a creerlo, había una vez,
vivía un hombre que hablaba por diez,
cambió por arte de magia.
Llaman a la puerta, ¡oh por Dios,
queréis callaros por favor!
Creo que ya empieza el show.
Llaman a la puerta, abre tú,
tú la invitaste, fuiste tú,
qué curiosa situación.
Tengo una crisis para ti,
ya empieza el show
de las sesenta voces.
Y si te como en el parqué,
fiesta con tus huesecillos, ¡qué ilusión!,
con tus huesecillos, ¡qué ilusión!
Yo soy Phil Collins.
Siguen en la puerta, ¿eres tú?
Pues sí, resulta que eras tú,
cómo son las circunstancias.
Marlene se acuchilla en mi salón,
creo que está peor que yo,
deben ser las circunstancias.
Marlene vienes por tu voluntad,
qué mala que es la soledad,
no hagas eso en mi sillón.
Para conseguir un gran impacto,
me enseñó a un pobre urbano
en un bote de formol.
Ella es Phil Collins.
Escuchad amigos, no estamos solos,
nos tenemos a nosotros mismos.