Si alguien aparece por aquí, se pone el fragmento anterior y no ha visto la película, seguro que cuando termine los ocho o nueve minutos que dura la secuencia le parecerá que no me he equivocado un ápice en mi descripción. Sólo el inicio ya te dice mucho:
Astérix: Queremos la forma A-38.
Viejo de recepción: ¿Matricular una galera? No, aquí no es. Tienen que ir allá, a la capitanía del puerto.
Astérix: No, no queremos matricular una galera, queremos la forma A-38.
Viejo de recepción: ¿El puerto? Lo encontrarán a la orilla del mar. Siempre ha estado ahí.
Astérix: Pero no queremos el puerto. (gritando) Queremos la forma A-38.
Viejo de recepción: ¿eeeehhh?
Astérix: (gritando) LA FORMA A-38.
Viejo de recepción: Aaghh. ¡Qué modales! ¡No grite! ¿Qué cree, que estoy sordo? Vayan a la ventanilla 1 por el pasillo de la izquierda, última puerta a la derecha.
(...)
Por otro lado, aprovecho para comentar que la película es, al menos para mí, el cúlmen de las aventuras de Astérix. Quizá porque se hizo antes de que Goscinny muriera, ya que él era el guionista y es evidente que las historias publicadas por Uderzo tras su fallecimiento han sido de un nivel menor (alguna de las últimas directamente infame). De hecho, estoy convencido de que ésta no será la única vez que hablaré de ella en esta sección.
No hay comentarios:
Publicar un comentario