En estas situaciones siempre acudo a mi fiel diccionario de la RAE para que me indiqué sobre lo más adecuado...Y resulta que la palabra "populismo" sencillamente no existe:
Me veo obligado, pues, a buscar por otros medios. Según Wikipedia: en política, el populismo (del latín: popŭlus, ‘pueblo’) es un término usado para designar a la corriente ideológica que sostiene la reivindicación del rol del Estado como defensor de los intereses de la generalidad de una población a través del estatismo, el intervencionismo y la seguridad social con el fin de lograr la justicia social y el Estado de bienestar.
(...)
El populismo en sentido positivo, lo que define es un sistema en el que el poder recaiga más en el pueblo que en sí mismo, no en que los políticos profesionales gobiernen para la mayor comodidad del pueblo.
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El populismo con una significación peyorativa, que es la principalmente usada, es el uso de "medidas de gobierno populares", destinadas a ganar la simpatía de la población, particularmente si ésta posee derecho a voto, aún a costa de tomar medidas contrarias al estado democrático. Sin embargo, a pesar de las características anti-institucionales que pueda tener, su objetivo primordial no es transformar profundamente las estructuras y relaciones sociales, económicas y políticas (en muchos casos los movimientos populistas planean evitarlo) sino el preservar el poder y la hegemonía política a través de la popularidad entre las masas.
No sé, quizás debiera volver a la RAE a bucear otro poco, pero el caso es que con la definición de Wikipedia ya descubro algo importante: el "populismo" no sólo es negativo, como se empeñan en mostrarlo en todos los medios de comunicación, sino que puede ser algo bueno. Ahora empiezo a ver más claras las cosas.
Cuando los políticos del PP y del PSOE (entre otros, pero sobre todo ellos) se refieren a Podemos y a su cabeza más visible como estandartes del Populismo, quizá estén en lo cierto, ya que lo que propugna este partido político en su programa viene a ser que haya "un sistema en el que el poder recaiga más en el pueblo que en sí mismo, no en que los políticos profesionales gobiernen para la mayor comodidad del pueblo.". Populismo, sí, pero bueno.
Sin embargo, no parecen darse cuenta de que son esos dos grandes partidos, los que nos han gobernado desde 1982, los que copan las instituciones desde entonces, los que han ido horadando nuestro Estado del bienestar hasta que parezca un queso gruyere, los grandes protagonistas del Populismo negativo. ¿No nos han demostrado desde siempre que "su objetivo primordial no es transformar profundamente las estructuras y relaciones sociales, económicas y políticas (en muchos casos los movimientos populistas planean evitarlo) sino el preservar el poder y la hegemonía política a través de la popularidad entre las masas. "? Pues eso, simplemente Populismo, pero del malo.
El otro día la inefable Esperanza Aguirre ¿debatió? con Pablo Iglesias en la televisión. Bajo mi punto de vista, lo que sucedió fue que la ex-presidenta madrileña fue a brear y salió escaldada con su propia medicina. Normalmente, en este tipo de situaciones la populista (en sentido peyorativo) dirigente del PP aprovecha su verbo fluido y su extraordinario desparpajo para apabullar al que se ponga por delante. En esta ocasión, como digo con recursos como los que ella usaba, Pablo Iglesias la puso a los pies de los caballos. Cada frase para provocar la risa que usaba ella era contrarrestada con una mejor y más hiriente por el líder de Podemos, tanto que al verse superada interrumpía de manera torpe y maleducada a su oponente, sin respetar el turno de palabra. Me sobraron ciertos gestos y caras de ir un poco sobrado por parte de Iglesias, aunque en general estuvo francamente bien. No le voté en las elecciones anteriores, pero desde luego entre la "casta" y Podemos, a día de hoy no hay color.
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