- Los recortes en todo lo público: Sanidad (total ya vivimos mucho, ¿no?), Educación (el que quiera que sus hijos estén preparados que lo pague y a la mierda la igualdad de oportunidades, ¿no?), Investigación (¿para qué vamos a apostar por nuestro propio desarrollo cuando podemos comprarlo fuera más caro?).
- La Ley Wert(güenza) de Educación: restringimos las becas (para ahondar en la diferencia entre ricos y pobres), separamos a niños y niñas (como hace 50 años) y además imponemos la religión, que si al menos fuera lo que propugnaba Jesucristo no estaría mal (aunque la idea de imponer es lamentable), pero que es la de esa minoría carca que cree que ser homosexual es un pecado y abortar cuando el crío que vas a tener tiene malformaciones también lo es.
- La Ley Fernández o Ley Mordaza (lo de llamarla "de seguridad ciudadana" es un chiste de muy mal gusto): básicamente es la que prohíbe el derecho al pataleo aunque éste sea pacífico. Nos van a violar con un soplete (como han hecho todo el año) y además tenemos que sonreír o nos multan y nos meten en la cárcel. Mientras hay gente peor, como los que tratan de saltar la valla en Melilla y se llevan cortes como los que trataban de huir de los campos de concentración nazis.
- La Ley Gallardón para el aborto: o cómo retroceder en el tiempo 30 años para que los avances en este campo los rija un personaje que se parece a Paco Clavel (Rouco) y que se pasa las ideas de Jesús por el forro (compromiso con los pobres y los desfavorecidos, amarse los unos a los otros, defender la justicia...Entre otras cosas) de tal manera que si hubiera estado con él, habría apedreado a la mujer de la Biblia por considerarse libre de pecado. Atroz.
- Los efectos de la reforma laboral: o cómo el paro sigue siendo escandaloso y la creación de empleo ínfima se produce en condiciones lamentables (bajos sueldos y nulas garantías de permanencia).
El caso es que a nivel personal, comparado con los últimos años, éste no ha sido especialmente malo. Me asenté en el trabajo (aunque no es una maravilla) donde el ambiente con la gente que me rodea es inmejorable. Viajé a Roma siguiendo los pasos del gran Enric González (una gozada), estuve en Sevilla previo a Semana Santa (comiendo tapitas ricas bien acompañado), fui a un concierto del gran Lorenzo Jovanotti en Florencia (de hecho monté el viaje alrededor del concierto, aunque visité también Pisa) y mis vacaciones estivales fueron fantásticas (no sólo lo del concierto, ya que estuve en un viaje fantástico de una semana en Turquía, después diez días con mi familia en Cantabria y luego en Fuengirola unos días en gran compañía). Además este año mis amigos y yo hemos hecho algo fantástico: instaurar los cumples sorpresa, en los que el cumpleañero recibe la sorpresa de celebrar su cumple sin saber cuándo ni dónde, además de ser disfrazado (a mí me tocó de mariquita y me lo pasé en grande...Aunque al día siguiente tuve una entrevista de trabajo telefónica en inglés y no estaba muy fino, la verdad). También es el año que más he leído (creo que al final serán 129 en total) pero creo que eso tiene que ver más con que trabaje en Mordor y disponga de mucho tiempo para leer en cada trayecto.
Y pese a todo sigo pensando que, querido 2013, deberías haber sido mejor. He escrito en el blog mucho menos que el año pasado. El Estu jugó la Copa del Rey, pero luego deambulamos por la liga y ahora mismo huele a descenso otra vez. El Madrid no ganó nada (al menos se piró el Perfectus Detritus lusitano) y el gordito no aprende nada (sigue sin ser titular absoluto Casillas, no quita a Arbeloa y menos mal que se ha lesionado el paquete de Khedira). Tengo gente cercana a la que quiero que no consigue trabajo (algo sucio e injusto, porque es gente preparadísima y capaz). Por eso, no me importa para nada que te vayas ya mismo, estoy esperando al siguiente para que te mejore y me (nos) dé lo que nos merecemos...
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